Homeless

"El muerto y el arrimado a los tres días apesta", tradujeron con la voz de Homero Simpson en mexicano. Y si antes me quejé infinitamente de no sentir el lugar físico que ocupaba antes como mi hogar, pues ahora una cosa se hizo realidad: No tengo dónde vivir.

Si bien estoy siendo acogida por el cálido hogar de unas compañeras de la universidad, pues igual me siento limitada cerebralmente de cualquier comportamiento independiente y es que el hecho de no tener una habitación que tenga mis cosas en la cual pueda andar como me plazca y blah...pues me empincha y me incomoda y absorbe mis energías al máximo y me deja con ganas de dormir a cada rato.

Tanto así que ni puedo terminar de escribir esto...

El espejismo de una realidad

Quiero escribir varias cosas solo que las palabras no fluyen y siento que una etapa se cerró y siento ya nostalgia pero sé que lo tengo que dejar ir.

Tal vez no fue el final que esperé, pero la ilusión que tenía no era más que eso. La realidad cruda y polvorienta surgió y prácticamente yo fui atrás de ella...los fantasmas quedan. Pero no para mí, yo a esos ya los cacé, los enfrenté y los pasé.

Ojalá él también lo pueda hacer algún día.

Años y años y al final nunca fue más de lo que vivimos -o de lo que vivió o de lo que él verdaderamente sintió.

Al final él fue siempre quien tuvo la palabra final...el sentimiento final.